lunes, 3 de noviembre de 2008

Los políticos rosarinos se enamoraron de internet


Los políticos rosarinos se enamoraron de internet
Ya nadie duda que internet es un disparador de opciones insospechadas. Incluso los políticos, que de a poco fueron encontrando en la web una forma cada vez más atractiva de difundir actos de gobierno, captar adhesiones o, simplemente, hacer campaña. En Rosario, donde el intendente Miguel Lifschitz abrió el camino, acaba de sumarse el concejal Jorge Boasso, quien estrenará sitio propio.
No hace mucho los políticos solían actuar por espasmos en la también llamada red de redes: se metían de lleno para amplificar su llegada a los votantes pero, una vez superada la etapa electoral, o por cambios de estrategias, desechaban los sites.
Ahora internet es la plataforma elegida por funcionarios en gestión para amplificar sus acciones, potenciar la comunicación e interactuar con los ciudadanos. Además, las nuevas tecnologías les otorgan un plus: la posibilidad de medir permanentemente el impacto de su imagen en la sociedad.
Boasso, del bloque Intransigencia Radical del Palacio Vasallo, es uno de los tantos que tomó nota y el martes próximo lanzará su sitio www.boasso24horas.com.ar.
El edil promete "un inédito e innovador sistema de servicio para los rosarinos, nunca antes presentado por un legislador, mediante el cual podrán conocer sus derechos y hacerlos valer para defenderse". También habrá un medio de consulta y contacto on line con el concejal.
A la cabeza del pelotón se mantiene Lifschitz, quien además de abrir el año pasado su propia página (www.mlintendente.com.ar) también tiene un espacio en Facebook, la red social que marca el pulso del mundo y que ya superó los 100 millones de usuarios (la Argentina es el tercer país donde más creció su utilización en 2008).
Esta herramienta virtual permite a los abonados contactarse entre sí y conocer nuevas personas y relacionarse. El acceso es simple y alcanza con tener conocimientos básicos en informática.
Sin embargo, Facebook también es sinónimo de polémica: existen acusaciones de avanzar sobre la privacidad de las personas (reclamo de una ONG canadiense) y fue ligado a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) por supuesto espionaje y reclutamiento. Además, rigen prohibiciones en Irán, Birmania y Bután.
En su página el intendente difunde antecedentes personales y conceptos sobre violencia, relación con la provincia y el rol de la oposición —entre otros temas—, discursos, fotos y datos de la ciudad, narradores rosarinos, encuestas, balances de sus gestiones y videos sobre encuentros con personalidades como Mirtha Legrand y Jorge Lanata.
Respecto de Facebook, la apuesta de Lifschitz es mantener un lugar de encuentro online, orientado específicamente hacia la juventud. Hasta el momento, los "amigos" en lista ascienden a 2.800.
La página incluye videos (de una reciente recorrida por el barrio La Cerámica, entre otros) y abundan artículos supuestamente redactados por el propio intendente. El texto titulado "A qué se debe el incremento de precio en el transporte público" le puso pimienta al foro de opinión, dividiendo las aguas entre los que aceptan las explicaciones oficiales y los que replican con fuertes críticas.
Tampoco escaparon a la fiebre el justicialismo provincial, que acaba de incorporarse al ciberespacio (pjsantafe.blogspot.com), el diputado provincial Marcelo Brignoni (www.marcelobrignoni.com.ar) y el senador nacional socialista Rubén Giustiniani (www.rgiustiniani.com/rgiustiniani.blogspot.com
).
Los aristas parecen preferir facebook (están el concejal Carlos Comi y el diputado provincial Pablo Javkin). Pero la diputada nacional Alicia Tate (UCR) y Darío Maiorana, rector de la Universidad de Rosario (UNR), también colgaron sus fotos en la red social.
Hasta el gobernador posee dos espacios en Facebook, presuntamente abiertos por simples adherentes o militantes socialistas ("Hermes Binner presidente 2011" y "Soy simpatizante de Hermes Binner").

jueves, 19 de junio de 2008

¿Qué es un Psicópata?


¿Qué es un Psicópata?

No se puede entender a los psicópatas en términos de retroceso o de desarrollo antisocial. Son simplemente individuos depravados moralmente que representan a los "monstruos" en nuestra sociedad. Son depredadores infrenables e imposibles de tratar en quienes la violencia es planeada, decidida y carente de emociones. Esta violencia continúa hasta que alcanza un tope alrededor de los 50 años, y luego disminuye.

Su falta de emociones refleja un estado de desprendimiento, de audacia y posiblemente disociado, revelando un sistema nervioso autonómico bajo y una carencia de ansiedad. Es difícil decir qué es lo que los motiva - posiblemente el control y la dominación - dado que la historia de sus vidas no demostrará generalmente ningún lazo de muchos años con otros ni mucha rima en su razón (excepto el planeamiento de la violencia).

Tienden a operar con una grandiosa conducta, una actitud pretenciosa, un apetito insaciable, y una tendencia hacia el sadismo. Su falta de temor es probablemente la característica prototípica (de base) (la hipótesis del poco miedo). Es útil pensar en ellos como si fueran vehículos de alta velocidad con frenos defectuosos.

Ciertos desórdenes orgánicos (del cerebro) y desequilibrios hormonales imitan el estado de ánimo de un psicópata.

Hay cuatro (4) subtipos diferentes de psicópatas. La distinción más antigua entre los tipos primario y secundario fue realizada por Cleckley en 1941.

Los PSICÓPATAS PRIMARIOS no responden al castigo, a la aprehensión, a la tensión ni a la desaprobación. Parecen ser capaces de inhibir sus impulsos antisociales casi todo el tiempo, no debido a la conciencia, sino porque eso satisface su propósito en ese momento. Las palabras no parecieran tener el mismo significado para ellos que el que tienen para nosotros. En realidad, no se sabe si llegan a comprender el significado de sus propias palabras, una condición que Cleckley llamó "afasia semántica." No siguen ningún proyecto de vida, y parece como si fueran incapaces de experimentar cualquier tipo de emoción genuina.

Los PSICÓPATAS SECUNDARIOS son arriesgados, pero son individuos también más proclives a reaccionar frente a situaciones de estrés, guerreros, y propensos a la culpabilidad. Se exponen a más estrés que la persona promedio, pero son tan vulnerables al estrés como la persona promedio. (Esto sugiere que no son "completamente psicopáticos." Puede ser debido a variaciones genéticas distintivas).

Son gente audaz, aventurera y poco convencional que comenzó a establecer sus propias reglas de juego a temprana edad. Son conducidos fuertemente por un deseo de escapar o de evitar dolor, pero también son incapaces de resistir a la tentación. A medida que su ansiedad aumenta hacia un cierto objeto prohibido, su atracción hacia ella también se incrementa. Viven sus vidas dejándose llevar por el aliciente de la tentación. Tanto los psicópatas primarios como los secundarios están subdivididos en:

Los PSICÓPATAS DESCONTROLADOS: son la clase de psicópatas que parecen enfadarse o enloquecerse más fácilmente y más a menudo que otros subtipos. Su frenesí se asemejará a un ataque de epilepsia. Por lo general son también hombres con impulsos sexuales increíblemente fuertes, capaces de hazañas asombrosas con su energía sexual, y aparentemente obsesionados por impulsos sexuales durante la gran parte de su vida que pasan despiertos. También parecerían estar caracterizados por ansias muy fuertes, como en la drogadicción, la cleptomanía, la pedofilia, cualquier tipo de indulgencia ilícita o ilegal. Les gusta la endorfina "alta" o "acelerada" del entusiasmo y de la toma de riesgos. El violador y asesino en serie conocido como el Estrangulador de Boston era un psicópata de este tipo.

Los PSICÓPATAS CARISMÁTICOS: son mentirosos encantadores y atractivos. Por lo general están dotados de uno u otro talento, y lo utilizan a su favor para manipular a otros. Son generalmente compradores, y poseen una capacidad casi demoníaca de persuadir a otros para que abandonen todo lo que poseen, incluso hasta sus vidas. Los líderes de sectas o de cultos religiosos, por ejemplo, podrían ser psicópatas si conducen a sus seguidores a causar su propia muerte. Este subtipo llega a menudo a creerse sus propias ficciones. Son irresistibles.

Los sociópatas han existido siempre en formas diversas y en distinto grado. Se los ha conocido bajo diferentes nombres. Se los ha estudiado utilizando varias técnicas, y a través de los años se han encontrado varias causas a su enfermedad. Pero una cosa nunca varía: todos los sociópatas poseen tres características en común: son individuos muy egocéntricos, sin empatía hacia los demás, e incapaces de sentir remordimiento o culpa. [El Sociópata – (The Sociopath) Rebecca Horton (Abril 1999)]

A pesar de que el psicópata tiene gustos y preferencias, y afición por los placeres que la compañía humana puede traer, el análisis demuestra que es totalmente egocéntrico, y que valora a los otros solamente porque aumentan su propio placer o mejoran su estatus. Mientras que él no brinda ningún amor verdadero, es absolutamente capaz de inspirar amor a veces hasta fanático en los demás.

Es por lo general superficialmente encantador y da muy seguido una impresión llamativa de poseer las cualidades humanas más nobles. Se hace de amigos fácilmente, y es muy manipulador, con su habilidad de palabras para salirse con la suya de cualquier apuro. A muchos psicópatas les encanta ser admirados y se regodean cuando los demás los adulan.

La carencia de amor trae también aparejada la carencia de empatía. El psicópata es incapaz de sentir lástima por otros en situaciones desafortunadas o de ponerse en el lugar de otra persona, sin importar que haya lastimado o no a esta última.

Cómo Ven los Psicópatas al Mundo

No sólo codician las posesiones y el poder, sino que también sienten un placer especial al usurpar o quitarle a los otros (a un hermano simbólico, por ejemplo); lo que puedan plagiar, estafar, y obtener mediante extorsión son frutos mucho más dulces de los que pueden ganar realizando de un trabajo honesto.

Y una vez que han agotado todo lo que pueden de una fuente, se vuelcan hacia otra para explotarla, chuparle la sangre, y después echarla a un lado; su placer al causar la desgracia de otros es insaciable. Utilizan a la gente como medio para alcanzar un fin; esta última debe ser subordinada y degradada de modo tal que los antisociales puedan justificarse...

Las causas de este desorden sociopático han sido reducidas a varios factores a través de la investigación. Se cree que una de las principales causas del comportamiento sociopático son anormalidades neurológicas, principalmente en el lóbulo frontal del cerebro. Esta área también se relaciona con el condicionamiento del miedo. La actividad anormal anatómica o química dentro de esta área del cerebro puede ser causada por un crecimiento anormal (posiblemente genético), una enfermedad cerebral, o alguna lesión. Esta teoría ha sido sostenida por mucha investigación usando la tomografía por emisión de positrones (TEP) que muestra de manera visual la actividad metabólica de las neuronas dentro del cerebro (Sabbatini, 1998).

Se sabe desde hace ya bastante tiempo que las amígdalas, dos regiones pequeñas ubicadas cerca de la base del cerebro, afectan a la agresión, la sexualidad y la imprudencia. Recientemente, también han demostrado afectar a la manera en que la gente interpreta las emociones de otras personas. Un daño sutil en las amígdalas puede explicar muchas de las características de los psicópatas - incluyendo la dificultad de comunicar emocionalmente con ellos. Puede ser que simplemente no puedan "ver" emociones en los otros. [¿Está Usted Casado con un psicópata?

El psicópata es un manipulador, que sabe exactamente lo que nos mueve y cómo manipular e influenciar nuestros sentimientos.

Poseen el talento de ver dónde hay mujeres “amables, cariñosas”.

La mímica es a menudo utilizada para convencer a los otros de que el psicópata es un ser humano normal. Él hace esto para crear una falsa empatía con su víctima. El psicópata intentará hacerle creer a Usted que tiene emociones normales, contando alguna historia triste o profesando experiencias profundas, conmovedoras; la verdad es que la mayoría de los psicópatas pasan por la vida como en una incubadora, emocionados por poca gente y sin sentir ninguna verdadera compasión hacia los demás; pero mentirán para convencerlo de que poseen emociones normales.

El factor de la compasión es una razón por la cual las víctimas se enamoran a menudo de esta "pobre” gente.

La mentira para el psicópata es como la respiración. Cuando se los pilla en alguna mentira y que son desafiados, inventan nuevas mentiras, y no les importa ser descubiertos. Como Hare plantea:

"La mentira, el engaño, y la manipulación son talentos naturales en los psicópatas... cuando son pillados en alguna mentira o desafiados con la verdad, rara vez quedan perplejos o desconcertados - cambian simplemente sus historias o procuran remoldar los hechos de modo que parezcan constantes con respecto a la mentira. El resultado es una serie de declaraciones contradictorias y un oyente profundamente confundido." [Hare].

A menudo, su comportamiento sirve para confundir y para reprimir a sus víctimas, o para influenciar a cualquier persona que llegue a escuchar la versión del psicópata sobre la historia.

La manipulación es la clave de sus conquistas, y la mentira es una forma de alcanzar esto.

Un ejemplo casi divertido de cómo mienten los psicópatas puede ser el de un hombre cuyas huellas fueron descubiertas en la escena del crimen. "No, ése no es mi pie" dijo, aunque todos sabían que estaba mintiendo.

Así es cómo los psicópatas operan. Negarán la realidad hasta que sus víctimas sufran de una crisis nerviosa. A menudo, el psicópata se volteará hacia la víctima y afirmará que ésta “está soñando” y que posee un desequilibrio mental.

El psicópata se distrae e impresiona principalmente por su propia representación ostentosa de sí mismo, lo que lo conduce muy seguido a decir involuntariamente a la gente cosas que lo llevan a su detección. A menudo se olvidan de las mentiras que dijeron y cuentan historias contradictorias, lo que hace que el que lo escucha se pregunte si el psicópata está loco, aunque en este caso no lo está realmente – sólo ha olvidado las mentiras que ha dicho.

Lo más asombroso, sin embargo, es su memoria selectiva. Puede que un psicópata no recuerde las promesas que le hizo ayer a usted, pero recordará algo del pasado si satisface de alguna manera sus propósitos. Frecuentemente hacen esto siempre que se los confronta o se los pilla en una mentira.

La mayoría de los psicópatas son muy arrogantes y engreídos. Sin embargo, cuando tratan de encantar a una víctima potencial, dicen las cosas "correctas" en el momento debido y le hacen creer que son almas buenas y generosas; no siempre, pero a menudo. La verdad es que los psicópatas no son altruistas y realmente no les importan las amistades ni los lazos.


Guggenbuhl-Craig declara que “son muy talentosos para aparentar ser mucho más humildes que la persona promedio, pero que difícilmente lo son.” Algunos también pueden fingir preocupación por los estratos sociales bajos y manifiestan que están del lado de los más débiles, los pobres, y así sucesivamente. Un psicópata puede afirmar, por ejemplo, (si es de una clase socioeconómica baja), que las personas ricas le desagradan profundamente, pero a la vez, por dentro anhela y envidia lo que tienen. Es como el narcisista, deseando reflejar una imagen falsa de sí mismo a través de sus pertenencias. Entre sus pertenencias están incluidos los seres humanos: novias, esposas e hijos.

Algunos psicópatas pueden ser muy cariñosos con los animales (contrariamente a la opinión general), pero los siguen viendo como objetos en relación con ellos mismos.

Por lo general, la mayoría de los psicópatas se jactarán infinitamente de sus hazañas y de las cosas “malas” que han hecho (a esto se le llama a menudo una señal de alerta, que prevendrá a las almas cuidadosas), pero mucho más frecuentemente que lo contrario, la mujer que está fascinada con él no escuchará a la razón, así y todo otros que lo conozcan la adviertan sobre su comportamiento pasado.

¿Por qué? Una vez más, porque el psicópata la hace sentir tan “especial”.

Por favor, señoras, si están comprometidas con un hombre así, deben aceptar el hecho de que esa NO es su VERDADERA personalidad. Sólo está jugando un PAPEL para ustedes.


El Dr. Black afirma que una de las señales más obvias de psicopatía es la manera en que el psicópata se jacta de sus experiencias, sin importar “cuán desagradables sean… su comodidad aparente con respecto a su comportamiento pervertido, la tranquilidad con la cual habla de romper cada regla, concuerda con la ASP (psicopatía).” [Black, 68]

El psicópata esta lleno de codicia por dentro, relacionándose con el mundo a través del poder, aunque, como dije, por fuera puede afirmar estar del lado de los desafortunados o de los oprimidos. Yo conocí a uno a quien le gustaba repetir frases como “tienen que dejar de oprimir a mis hermanos” pero eso no significaba nada para él. De hecho era racista. El psicópata se identifica también a menudo a sí mismo como revolucionario.

Por otro lado, el psicópata también presenta muy seguido una imagen de sí mismo como el antihéroe deprimido (del tipo de “su propio peor enemigo”) y a algunos les gusta verse a sí mismos como lobos solitarios. El psicópata puede incluso afirmar que es sensible y profundo, pero por dentro no es nada más que vacío y codicia.

Si el psicópata es conciente o no de su conducta, es algo que se debate a menudo. Yo creo que los psicópatas normalmente saben exactamente lo que están haciendo, aunque otros sugieren que los psicópatas “nacen, no se hacen.”

Yo creo que la psicopatía es principalmente genética. Un hijo con un padre psicópata frecuentemente será psicópata también, especialmente si el padre era abusivo y/o abandonó a la familia también.
Como ya se mencionó, los psicópatas a menudo afirman decidirse por la segunda mejor opción (la de ser su propio peor enemigo) y entonces piensan que merecen algo mejor. Esto puede ser manifestado en la manera en que buscan el poder – a través del dinero (es decir, bienes materiales), manipulación y/o tratando a las personas como objetos. Teniendo un comportamiento tal, el psicópata está también tratando de “vengarse” de la sociedad y del mundo, para poder obtener una retribución. Pasarán toda su vida haciendo esto, ya sean ricos o pobr
es, o cualquiera que sea su situación social, aunque estudios han mostrado que a menudo vienen de un nivel socioeconómico y/o estatus social empobrecido o bajo. (En uno de los estudios del Dr. Donald Black, muchos de los hombres eran “en su gran mayoría blancos, de clase trabajadora y media baja, y casados, y la mayoría no se habían graduado del la escuela secundaria”, [Black, 14]).

Permítanme añadir que a pesar de los estudios del Dr. Black, los psicópatas pueden existir en cualquier clase social. No se dejen engañar. También me gustaría señalar que estaré usando “él” para el término de psicópata en todo este sitio Internet; pero que no se olvide, sí, que las psicópatas también existen; sin embargo, de acuerdo con la Sexta Edición de Abnormal Behaviour (Comportamiento Anormal), impresa en el 2000 por tres profesores hombres, David, Derald, y Stanley Sue, los índices si varían por genero. En su excelente texto hay incluido un reporte realizado por la Asociación de Psiquiatría Americana que dice que la estimación general es del 3% en los hombres, y de menos del 1% en las mujeres [Personality Disorders and Impulse Control Disorders, Trastornos de la Personalidad y Trastornos de Control de Impulsos, 238].

Lo que es muy inquietante acerca de los psicópatas, además de que se sienten con derecho y poder sobre todo, es la completa carencia de empatía hacia las personas normales, ya que los “(psicópatas) antisociales parecen carecer de conciencia moral, sintiendo poca o nada de empatía por las personas cuyas vidas afectan… el antisocial resiste sin esfuerzo a toda regulación, incapaz de ver mas allá de su interés personal o de adoptar estándares de lo correcto contra lo erróneo”. [Black, XIII]

No todos los psicópatas son inadaptados sociales sin educación y pobres. Algunos de ellos son bastante atractivos y tienen buenas profesiones, y usan esto aún más para su beneficio. Echen un vistazo a Ted Bundy; una vez, la madre de un amigo fue a una cita doble con él y afirmó que era una persona extremadamente agrad
able. Su madre dijo que era “el mejor hijo que una madre podría llegar a tener”. Aparentemente Bundy era bastante apuesto, lo que lo hacia aún mas peligroso. Así que no todos los psicópatas están arruinados, o son de clase baja o expulsados de la escuela, hay varios que también trabajan en ocupaciones profesionales; el hecho es que hay más psicópatas que provienen de sectores humildes que los que no.

[Nota del GFC: La afirmación de Black, de que más « psicópatas » parecen provenir de contextos pobres parece estar siendo revisada. De hecho, Black no parece comprender verdaderamente en su totalidad la diferencia entre Psicopatía y Desorden de la Personalidad Antisocial. Como Robert Hare lo señala, sí, hay muchos psicópatas que también son “antisociales” pero parece haber muchísimos más entre ellos que nunca serían clasificados como antisociales o “sociopáticos.”

En un artículo reciente, “Construct Validity of Psychopathy in a Community Sample. A Nomological Net Approach (Validez Conceptualizada de la Psicopatía en una Muestra de la Comunidad. Un Enfoque Neto Teórico)”, Salekin, Trobst, Krioukova, Journal of Personality Disorders (Revista sobre los Trastornos de la Personalidad), 15(5)m 425-441, 2001), el autor afirma que:

“La psicopatía, tal como fue concebida originariamente por Cleckley (1941), no se limita al hecho de involucrase en actividades ilegales, sino que también abarca características de la personalidad tales como la manipulación, la falta de sinceridad, el egocentrismo, y la falta de sentimiento de culpa – características que se encuentran claramente presentes en criminales, pero también en cónyuges, padres, jefes, abogados, políticos y directores ejecutivos, por nombrar solamente a algunos. (Bursten, 1973; Stewart, 1991). Nuestro propio examen de la prevalencia de la psicopatía dentro de una población universitaria sugirió que quizás el 5% o más de esta muestra podría ser estimado como psicopático, si bien la gran mayoría de ellos son hombres (más de 1/10 versus aproximadamente 1/100 mujeres).

“Como tal, la psicopatía podría estar caracterizada…. como consistiendo en una tendencia hacia am
bos el dominio y la frialdad. Wiggins (1995), resumiendo varios hallazgos previos… indica que tales individuos son propensos a enfadarse y a molestarse, y que están dispuestos a explotar a otros. Son arrogantes, manipuladores, cínicos, exhibicionistas, Maquiavélicos, vengativos, buscando causar sensación y siempre un beneficio personal. Con respecto a sus pautas de intercambio social (Foa & Foa, 1974), se atribuyen el amor y el estatus a sí mismos, viéndose como altamente respetables e importantes, pero no prescriben ni amor ni estatus a los demás, ya que los ven como indignos e insignificantes. Esta caracterización concuerda claramente con la esencia de la psicopatía tal como es descrita comúnmente.

“La investigación actual buscaba responder a algunas preguntas básicas sobre la características psicológicas de la psicopatía en contextos no forenses… Haciendo esto hemos vuelto al énfasis original de Cleckey (1941) sobre la psicopatía como un estilo de la personalidad no sólo presente entre los criminales, sino también en personas exitosas en la sociedad.

“Lo que queda claro de nuestros hallazgos es que: (a) la medidas de la psicopatía han convergido en un prototipo de la psicopatía que implica una combinación de características interpersonales dominantes y frías, (b) la psicopatía sí existe en la comunidad y en una tasa quizás más elevada que lo esperado; y (c) la psicopatía parece coincidir poco con los trastornos de la personalidad excepto por los Trastornos de la Personalidad Antisocial. …

“Está claro que en donde mucho más trabajo se necesita hacer, es en entender qué factores diferencian al psicópata constante (aunque quizás no constante moralmente) del psicópata que infringe la ley; dicha investigación necesita sin ninguna duda que se utilicen muchos más casos no forenses de lo que ha sido habitual en el pasado.”

En resumen, si desea aprender algo sobre la psicopatía, no lea a Black. El único tipo de psicópatas que estudió fueron los fracasos, los que terminaron en la cárcel o en hospitales psiquiátricos. Ten
ga esto presente a medida que continúe leyendo los extractos de esta página.]

Además, no todos los psicópatas son tranquilos y serenos. Algunos de ellos parecen extraños o inadaptados, y su comportamiento puede ser excéntrico o inusual. Creo que esto es lo que confunde más seguido a las víctimas. Los psicópatas casi siempre parecen intensos y “electrizantes”. No se deje engañar si alguien aparenta ser inofensivo, “estúpido”, o parece poco convencional. Una cara “angelical” también puede engañar a la gente. Sólo imagine como ejemplo a John Wayne Gacy en su “disfraz de payaso” mientras entretenía a niños.

Otro ejemplo que alguien del foro de “Víctimas de la Psicopatía” mencionó, fue Bill Clinton y su conducta “tontorrona” pero agradable. (¿Entonces es Clinton realmente un psicópata? Muchos creen que sí.)
Un psicópata (fue diagnosticado como antisocial) que yo conocía usaba muy bien el disfraz de inofensivo. Todos pensaban que era muy gracioso. Yo también lo pensé, al principio. Luego, poco a poco me fui dando cuenta de que algo “no andaba bien” acerca de él. Al principio sus juegos aparentemente inofensivos eran encantadores, pero más tarde se volvió más bien una molestia y perturbaba nuestro ambiente de trabajo, lo que creó caos y tensión entre los empleados. He aprendido que un psicópata puede utilizar estos disfraces para satisfacer a su propósito personal secreto. Sin importar la raza, la clase social, ni la ocupación, el psicópata es sin embargo peligroso para la sociedad, porque “la naturaleza de la PAS (psicopatía) implica que causa más caos en la sociedad que la mayoría de las otras enfermedades mentales, dado que el desorden involucra ante todo reacciones en contra del ambiente social que arrastran a otras personas a su red de destrucción… la desesperación y la ansiedad causada por antisociales (psicópatas) afecta trágicamente a familias y comunidades, dejando profundas cicatrices físicas y emocionales…” [Black, 5]

Hay mucho sobre la personalidad del psicópata que es desconcertante e inquietante. Una de más o menos cada 25 a 30 personas son psicópatas (también conocidos como sociópatas o antisociales- el nombre correcto es psicópata). Ya que la mayoría de ellos son hombres, escribí (Wendy Koenigsmann) este sitio para
poder, en parte, advertir a las mujeres acerca de los peligros, especialmente para mujeres conectadas a Internet, el cual creo es un “nuevo medio” favorito que atrae a los psicópatas. Tengo experiencia personal en este tema también. Esto se debe a que los “anti-sociales (psicópatas) no son sólo personajes en nuestros programas de entretenimiento ficticios o de la vida real. Son miembros de familia, amigos, compañeros de trabajo, vecinos, o extraños con quienes podemos encontrarnos a diario.” [Black, 10].

Pamela Jayne, M.A., escribe que “el 30% de los hombres son sociópatas.” [el GFC nota que ella no está utilizando el término “psicópata”]. Si alrededor de 3 de cada diez hombres que pueda llegar a conocer son psicópatas, yo asumiría que es algo que no se puede tomar a la ligera. De acuerdo con estas estadísticas, eso querría decir tres de cada diez hombres y tal vez una de cada diez mujeres.

La verdad es que realmente no sabemos con exactitud cuántos individuos son psicópatas; sin embargo, parece haber un incremento en la prevalencia de la psicopatía y es por eso que algunos alegan que la cifra es mayor
. El Dr. Black asegura que la psicopatía encabeza justo detrás de la depresión, junto con la esquizofrenia y los trastornos límite de la personalidad, lo que es un hecho asombroso.

[Nota del GFC: Hare dice que la Psicopatía es MÁS frecuente que la depresión, la esquizofrenia y los DPL (desordenes de personalidad límite). Según todo lo que lo que sabemos, muchos depresivos se vuelven esquizofrénicos, o desarrollan DPL, y esto les sucede como resultado de interacciones con los psicópatas. El psicólogo Andrew Lobaczewski dice lo mismo en su libro "Ponerología Política"- (“Political Ponerology”)]

Los psicópatas son generalmente ingeniosos y elocuentes y casi siempre "con mucha labia." Pueden ser oradores “divertidos y entretenidos”, listos para dar una réplica rápida, y pueden contar historias inverosímiles pero convincentes...

Pueden ser muy eficaces para dar una buena impresión y a menudo son muy agradables y encantadores. A algunas personas, sin embargo, les parecen demasiado escurridizos y melosos, por demás obviamente falsos y superficiales. Los observadores astutos se llevan a menudo la impresión de que los psicópatas están actuando como en una obra de teatro, "leyendo mecánicamente sus versos." [Hare, 35].

... Pueden divagar y contar historias que parecen inverosímiles a la luz de lo que se sabe de ellos. Es típico que procuren dar la impresión de estar familiarizados con la sociología, la psiquiatría, la medicina, la psicología, la filosofía, la poesía, la literatura, el arte, o el derecho. Un indicador de este rasgo es a menudo una ligera falta de preocupación a ser descubiertos." [Hare, 35].

Un individuo psicopático que yo conocí afirmaba tener el coeficiente intelectual de un genio y estar estudiando simultáneamente varias carreras en la universidad. "Cuando descubrí que tenía el índice de inteligencia de un genio, allí es cuando todos mis problemas comenzaron" dijo. Yo le pregunté, "¿Por qué?" Él contestó, " Porque soy demasiado inteligente para mi propio bien." Al final descubrí que estas eran mentiras porque de hecho, había abandonado sus estudios en la escuela secundaria.

[Nota del GFC: “Ser uno de los que abandonan los estudios en la escuela secundaria” no significa que una persona NO SEA un genio. De hecho, visto y considerando el sistema educativo de los Estados Unidos, es muy probable que muchos genios SÍ abandonen la escuela debido a la frustración y al aburrimiento. ]

A pesar de sus fracasos, los psicópatas tienen “una visión muy narcisista y exagerada de su autoestima e importancia, un egocentrismo verdaderamente asombroso, presuntuosidad, y se ven a sí mismos como el centro del universo, como seres superiores justificados a vivir según sus propias reglas." [Hare, 38].

A menudo dan la impresión de ser " fanfarrones descarados y arrogantes – seguros de sí mismos, obstinados, dominantes, y engreídos. Les encanta tener poder y control sobre lo demás y parecen incapaces de creer que la gente pueda tener opiniones válidas diferentes las suyas. Parecen carismáticos o 'electrizantes' para algunas personas." [Hare, 38].

Yo (Wendy Koenigsmann) sé exactamente lo que Hare quiere decir cuando recuerdo a una persona que conocí (quien había sido diagnosticada); parecía estar siempre encantando a la gente a su alrededor, aunque al final cada mujer que caía en su trampa terminaba volviéndose hostil al darse cuenta de que lo único que él había estado haciendo era engañarlas a todas simultáneamente.

El psicópata es insensible, falto de remordimientos y de empatía, aunque a primera vista no parezca ser así. A menudo es excesivamente ingenioso, como un camaleón, encantador (pero no siempre, sobre todo cuando no está de "buen" humor), es una persona que atrae a un círculo de admiradores alrededor suyo en cada reunión, pero más a menudo, la gente lo evita - una vez que descubren cómo es realmente.

Los psicópatas terminan por lo general asociándose con otros como ellos, aunque en algunos casos no siempre se llevan tan bien. A veces se aparean con otros psicópatas y se convierten en un equipo unido, uno puede ser un "hablador" mientras que el otro es un "hacedor," y así sucesivamente, aunque Yo (Wendy Koenigsmann) creo fervientemente que estos papeles son intercambiables cuando tratamos con un dúo psicopático. Hare expone que, "Siempre y cuando sus intereses sean complementarios, forman una pareja formidable." [Hare, 65]. También se ha dicho que puede ser que algunos conocidos nunca lleguen a descubrir realmente el lado verdaderamente oscuro de los psicópatas.

Los psicópatas y las relaciones

Es en este terreno que el psicópata se acerca más al sicótico. A pesar de que en apariencia posee completamente su capacidad de razonar, determinada y probada por todos los medios de la psicología clínica, el psicópata demuestra una inhabilidad para comprender el significado y la significación de su comportamiento hacia los demás, y para juzgar las probables reacciones a su comportamiento. Se asombra a menudo de encontrarse con que la gente se sienta ofendida por sus hazañas. [Gordon Banks].

Las mujeres… histriónicas... son particularmente atraídas por y vulnerables a los hombres psicopáticos. La mujer histérica con desorden de la personalidad es propensa a enamorarse del psicópata... Es capaz... de corresponder en este ciclo proyectivo-introyectivo predominantemente idealizando al personaje psicopático. Su necesidad de apego y de dependencia complementa el deseo del psicópata de separación y autonomía; ella percibe a los otros como gente capaz de darlo todo y benévola, y él como gente capaz de robarlo todo y malévola.

La mujer histérica es inmune a desarrollar una sospecha sana cuando los detalles o las circunstancias no coinciden (también en lo que concierne a la falta de lógica en los pensamientos/comportamiento del psicópata) ni corroboran la versión oral del psicópata en cuanto a su historia. [De “La Mente Psicopática" – Orígenes, dinámica y tratamiento, "The Psychopathic Mind - Origins, Dynamics and Treatment”, de J. Reil Meloy]

El verdadero peligro en cuanto a los psicópatas es que algunas mujeres en especial, tienen realmente una predisposición psicológica a encariñárseles. Incluso hasta se enamoran de ellos. Estas mujeres, generalmente de personalidad histérica o histriónica, se sienten poderosas cuando se encariñan con el psicópata, sin importar la verdad que se les haya dicho sobre él, ni lo que él mismo les haya dicho. Algunas de estas mujeres tienen la fantasía subyacente de sentir que el psicópata está bajo su control (según Meloy).

Al mismo tiempo, yo (Wendy Koenigsmann) me pregunto a menudo si son solamente las "neuróticas" quienes son víctimas de los psicópatas. Se debería decir que Freud es responsable de toda la acuñación de mujeres neuróticas, lo que me hace sospechar un poco. Presentaré la información, pero al mismo tiempo, no estoy totalmente de acuerdo con ella, porque pareciera que todas las mujeres, sin importar que sean o no de naturaleza "neurótica", representan presas para los psicópatas.

Hemos oído hablar de los casos extremos, tales como las mujeres que se enamoraron del Acosador Nocturno, Richard Ramírez, pero en general, usted encontrará a psicópatas en lugares absolutamente inocuos, y siempre saben identificar a una mujer vulnerable que alimente su propia imagen de grandiosidad. Por supuesto, el atractivo ayuda en estos casos. Se ha especulado que la razón por la cual muchas mujeres se enamoraron de Ramírez fue probablemente también intensificada por su bella mirada pensativa y el hecho de que podía parecer vulnerable, "como un niñito," dijo una admiradora.

Todavía queda por comprobar si el hecho de sentir compasión hacia un hombre hace que una mujer sea neurótica o no.

Pero la verdad es que un psicópata atractivo es probablemente más peligroso que uno menos atractivo, sin excepciones.

Para muchas mujeres, el encariñarse con un psicópata va más allá del mero análisis freudiano - muchas niegan simplemente la verdad, confiando ciegamente e ignorando la realidad. Algunas, hasta cuando se les presentan fríamente los hechos concretos, seguirán todavía admitiendo que no pueden dejar de amar a su compañero psicopático, incluso después de haber sido desechadas por él. Este problema es psico-sexual (mujeres que poseen ellas mismas desórdenes de la personalidad y que se obsesionan con los psicópatas), o bien las mujeres que simplemente no admiten la verdad son ignorantes frente a la situación. Puede incluso ser una combinación de todo tipo de factores.

De cualquier manera, el psicópata sabe a quién "elegir."

Como ya lo he dicho (Wendy Koenigsmann), la información concerniente a "mujeres histriónicas" e "histéricas" como las víctimas típicas fue tomada de las ideas de Meloy, pero no parecería ser la norma. Cualquier persona puede ser engatusada y enamorada por el psicópata.

Los psicópatas pueden tomárselas con todos, ya sean ricos o pobres, inteligentes o no tan brillantes. Aunque pareciera que los enfermos mentales son más susceptibles: las ya mencionadas histriónicas, etc., así como víctimas al borde de un trastorno de la personalidad.

También, intentar “distinguir” a un psicópata por su aspecto no es fácil, como ya lo he hecho notar. Como me dijo un estudiante de psicopatía, "cambian a menudo de aspecto para no parecer amenazadores, o para crear un personaje."

Tim Field, un autor célebre e investigador en psicopatía, cree que el psicópata selecciona a gente que puede ver a través de él: “la aparente autoestima y la confianza en sí mismo de un matón (sociópata) es en verdad arrogancia, una creencia insostenible de invulnerabilidad agudizada por su voluntad de actuar fuera de los límites de la sociedad para asegurar su supervivencia. Los blancos (o víctimas) son gente que puede ver a través de la arrogancia y percibir la concha vacía detrás de ella - y los matones saben detectar a quiénes pueden ver a través de ellos, lo que promueve la eliminación del blanco." [Matón En línea- Bully OnLine]. Esto sucede generalmente en el ambiente de trabajo, y en situaciones en las que el psicópata deja caer su máscara.

Según el autor de La Mente Psicopática (The Psychopathic Mind) (Meloy), cuando necesita manipular a una mujer, el psicópata apunta por lo general a mujeres a menudo llamadas del tipo "rubia tonta”, la clase de mujer que emana inocencia, por lo general inconsciente de su propia sexualidad, de inocencia sosa, y muy seguido no demasiado inteligente - sus personalidades están generalmente al borde de una actitud tonta o ciegamente optimista, y siempre piensan que el bien se esconde detrás del mal. No es que haya nada esencialmente malo en cuanto a la inocencia o al optimismo, pero al tratar con un psicópata, eso puede resultar siendo una mala combinación. Los psicópatas parecen sentirse particularmente atraídos por este tipo de mujer. Ella es cariñosa y lo da todo, mientras que él es cerrado y retentivo.

Tienen "una capacidad extraña para ver y utilizar a mujeres 'maternales' - es decir, las que tienen una profunda necesidad de ayudar o de mimar a los demás." [Hare, 149].

Como lo relata Hare, un "misil particular en busca de protección y amor de madre ", quien tenía la reputación local de atraer a una multitud constante de visitantes del sexo femenino, parecía poseer este talento. Él “no era especialmente apuesto ni muy interesante al hablarle. Pero tenía una cierta cualidad querúbica que algunas mujeres, incluyendo miembros del personal, parecían encontrarle de atractivo. Una mujer comentó que ella ' tenía siempre el impulso de mimarlo.' Otras dijeron que 'necesita que lo cuiden como a un hijo.' " [Hare, 149].

A los psicópatas también les gusta "apegarse" a mujeres de un estatus social más elevado, a una mujer que represente lo que él quisiera ser. Entonces, cuando termina con ella, puede destruirla y "matar a dos pájaros de un tiro."

Sin embargo, sin importar detras de qué tipo de personalidad anden los psicópatas, todas las mujeres siguen siendo un blanco.

Al igual que el narcisista, el psicópata posee una actitud arrogante, desdeñosa, y condescendiente; sin embargo, déjeme dejar esto en claro: a menudo en la etapa inicial en la que seduce a alguien nuevo, su verdadero carácter se mantiene oculto, naturalmente. Es por eso que, cuando una mujer advierte a otra mujer que un hombre es un psicópata, su más reciente víctima no será capaz de creer en las historias malas que le cuentan sobre él. Su respuesta será "Pero es tan encantador, tan amable, tan agradable..." y así sucesivamente. Sí. Exactamente. Él está jugando con usted también.

Los psicópatas tienen una estructura ostentosa que demanda de ellos "una devaluación desdeñosa y desapegada de los demás" [Gacon et al 1992], para ocultar su envidia hacia lo que es bien percibido en la gente. Reaccionan hacia capacidades de encariñamiento percibidas o existentes en ellos con ambivalencia y a menudo con agresión. Según Meloy, la mayoría de ellos transfiere ese acoplamiento a "objetos duros" como por ejemplo las armas, los cuchillos, [prácticas mágicas], etc. El ser ostentoso está así representado en el arma o el objeto y es una proyección de ellos mismos. Esto por supuesto es un estudio profundizado del psicópata. No todos los psicópatas tienen una colección de armas o un cuchillo o una espada favoritos, pero a muchos parecen gustarles las armas y tales símbolos de agresión y de dominación. No estoy segura de si esto es verdad en todos los casos, pero a un psicópata que conocí una vez le encantaban las espadas. Estaba obsesionado con ellas y amaba las armas de todo tipo.

Cómo Tratar con Psicópatas

Si usted deja al psicópata, espere que sea del tipo que no hace ningún "ruido" sino que solamente destruye su reputación esparciendo mentiras, o bien espere mucha manipulación abierta (una tentativa final para adquirir poder y control).

Por ejemplo, yo dejé a un psicópata, y hasta el día de hoy, siempre que se le dé la oportunidad, él le pedirá a amigos que me adviertan de que no soy más que un "bichito" en su parabrisas y que él tiene la capacidad de destruirme como a un insecto. Entre tanto, también ha esparcido historias falsas sobre mí a cualquiera que las escuche.

¿Por qué hace esto?

Después de haber tratado con este comportamiento molesto durante casi dos años, he llegado a una conclusión: a pesar de que no pueden realmente amar a otra persona, y de que carecen de verdaderas emociones arraigadas, los psicópatas se relacionan con los demás a través del poder y del control. Si alguien procurara realmente "menospreciar" (desde su punto de vista, esto es muy cierto) su poder y su control, él reaccionará de algún modo. El psicópata también dio la imagen de tener el control diciendo que "me había echado de una patada", a pesar de que vivía en la casa de su madre. Más adelante, también le dijo a mi amigo que yo no había sido nada más que un "experimento" para él, después de que yo he perdido dinero, tiempo, y de haber sufrido profundamente a causa de sus mentiras y de su manipulación. Cuando digo “sufriendo”, también incluyo una depresión extrema que duró casi dos años, ya que él no paró de atacarme durante los dos años que siguieron al momento en que lo dejé (e incluso hasta el día de hoy).

Creo que algunos individuos son lo suficientemente fuertes como para hacerle frente al psicópata; desafortunadamente, no toda la gente lo es, y la mayoría de los psicópatas logran dañar permanentemente a sus víctimas. Esta es la razón por la cual necesitamos definitivamente más grupos de ayuda para la gente que se ha involucrado en relaciones con psicópatas.

En síntesis, la experiencia de tratar con un psicópata puede ser muy inquietante para la mayoría de la gente, sin mencionar que, cuando lo tiene a usted atravesado, puede estar seguro de que será infamado falsamente, sin lugar a duda. Recientemente le pregunté a Field lo que uno puede hacer cuando se enfrenta con las mentiras de un psicópata (Field se refiere a ellos como sociópatas) y a la ausencia evidente de justicia a la hora de observar su comportamiento - la respuesta de Field fue:

"La lección más importante que he aprendido es que al tratar con un sociópata, las reglas normales de etiqueta no se aplican. Usted está tratando con alguien que no tiene ningún tipo de empatía, ninguna conciencia, ningún remordimiento, ni ningún sentimiento de culpa... es un pensamiento totalmente diferente. Palabras tales como “depredador” y “malvado” son utilizadas frecuentemente."

Si usted intenta tratar con psicópatas de una manera ética, quedará escandalizado. El Dr. William Higgins afirma que "no se puede negociar ni hacer un trato con los psicópatas."

Los psicópatas no sólo negarán y lo trivializarán, sino que también evitarán contestar directamente a las preguntas que usted les haga, e incluso cuando parecen contestarle, puede estar seguro de que no es la respuesta que buscaba. Se ha dicho que incluso cuando sí le dan una respuesta directa, ellos nunca tratarán el verdadero tema, a pesar de que pueden incluso revindicar ser honrados cuando eso los satisface. Pero no se engañe, es para esto que el psicópata desea a su víctima - él desea avergonzarlo al mismo tiempo que lo hace encajar en sus planes; esto se debe a que "los psicópatas muestran una gran falta de preocupación por los efectos devastadores que sus acciones tienen en los demás. Muy seguido son totalmente francos sobre el asunto, afirmando tranquilamente que no sienten ningún sentimiento de culpa en absoluto, que no lamentan el dolor ni la destrucción que han causado, y que no hay razón alguna para que se preocupen." [Hare, 41].

Por otro lado “los psicópatas pueden expresar remordimiento verbalmente, pero luego contradecirse con palabras o acciones.” [Hare, 41] Puede que los psicópatas se disculpen o muestren remordimiento sólo para salirse con la suya, pero al final usted será apuñalado por la espalda y se dará cuenta de lo superficiales que eran sus palabras.

Los psicópatas parecen no poder recordar lo que han dicho o en lo que se han comprometido hace mucho tiempo. Parecen estar siempre viviendo en el presente. Es por eso que a menudo son culpables de ser "grandes fabricantes de promesas" que no pueden cumplir con su palabra. Una vez más será la víctima quien deberá acarrear con las consecuencias de todas las distorsiones y las vueltas del psicópata, y cuando él consigue enfadarlo lo suficiente, lo desacreditará de "defectuoso", y así el psicópata logrará hacerse pasar muy seguido por la verdadera víctima. Como John Wayne Gacy dijo una vez, "Yo era la víctima, fui engañado desde mi niñez."

Lo que sucede a menudo como consecuencia, tal y como Field lo ha indicado, es que la víctima puede reprimir su enojo durante un tiempo, pero luego, por lo general muchos meses más tarde, puede que el individuo se de cuenta repentinamente de la verdad, y de que desde el primer momento ha sido intimidado por el psicópata. Ahí es cuando la víctima se enfada mucho de repente y se siente motivada a lograr cierta clase de justicia. Pero si intenta obtener justicia de un psicópata, sepa que será usted el que termine pagando a menos que se imponga firmemente; la experiencia lo confundirá y desconcertará aún más, y eso puede incluso tentarlo a jugar con fuego.

En algunos casos, nuestra sociedad permite que la psicopatía exista porque realmente no luchamos contra los comportamientos engañosos y mentirosos (un buen ejemplo: Bill Clinton). También son buenos para engañar a sus propios psiquiatras. Por ejemplo, dos individuos que yo (Wendy Koenigsmann) conocí se jactaban de disfrutar jugando a juegos psicológicos con psiquiatras.

"Yo era un caso de estudio; no podían nunca darse cuenta de lo que fallaba conmigo, así que yo jugaba simplemente a juegos psicológicos con ellos", comentó uno de ellos. Él también aprendió, leyendo sobre psiquiatría y yendo a terapia, que podría simplemente "echarle la culpa a otro" para conseguir salir impune. "Sólo acuso a otro" dijo él, despreocupadamente.

Cuando se le preguntó en detalle por qué odiaba tanto a su madre, (él afirmaba que ella abusaba de él física, mental y emocionalmente), contestó: "Porque mi madre proyecta en mí a todos los gilipollas que la abandonaron."

Es por esta razón que Hare cree que la terapia vuelve peores a los psicópatas; la mayoría de ellos aprenden sobre emociones humanas a través de la psiquiatría, y "les encanta atribuir sus defectos y problemas al abuso infantil." [Hare, 50]. También, los "antisociales (psicópatas) mismos pueden ser poco colaboradores o desagradables, complicando los esfuerzos que se hacen por estudiarlos y tratarlos." [Black, 12].

En cuando a la recuperación del psicópata, a pesar del dolor que esto pueda dejar (alguna gente nunca se recupera, según Field), usted aprenderá lo sencillos y a la vez cobardes que son los medios del psicópata para guardar la calma. Esa es simplemente la manera en la que el psicópata debe funcionar para mantener su propia imagen, relativamente frágil (aunque petrificada de por vida).

Mientras que pocos psicópatas cometen crímenes violentos, la crueldad del psicópata promedio oscila generalmente dentro de acciones sutiles, pero sin embargo devastadoras:

"Exprimir a los demás como un parásito y despojarlos de sus posesiones, ahorros, y dignidad; hacer y tomar agresivamente lo que ellos desean; descuidar vergonzosamente el bienestar físico y emocional de sus familias; involucrarse en una serie interminable de relaciones sexuales ocasionales, impersonales y triviales; entre otras cosas." [Hare, 45].

Ésta es una característica mayor de su carencia de empatía. También le advertimos que el psicópata gastará mucho esfuerzo (a expensas de la víctima) en crear planes, expectativas, etc., pero que darán muy poco, o nada, a cambio. Cuando él sabe que le ha hecho algo con lo cuál usted puede no llegar a conformarse, tendrá una posibilidad de escapatoria lista de antemano. La mayoría de la gente normal hace lo mismo, en un sentido general, pero el psicópata lo hace de puro egoísmo, avaricia, y crueldad. No le importará herir o no sus sentimientos. Cualquiera sea la traición que él promulgue, esta última no será más disimulada una vez que se le acabe la función.

(Wendy Koenigsmann) quisiera contar la experiencia de una amiga mía originaria del Japón. Ella se había estado comunicando con un hombre que vivía en San Diego desde hacía más de un año, y durante la época de su correspondencia y llamadas telefónicas, él parecía muy "dulce, cariñoso y amable." Ella mencionó lo maravillosamente escritos que estaban sus e-mails, entre otras cosas.

Llegó un momento en el que este hombre le propuso casamiento, y, para rematarla, le prometió que tenía un trabajo esperándola en la ciudad en donde él vivía, e incluso le envió una carta de la compañía con toda la información.

Bueno, mi amiga le creyó y vino a los Estados Unidos para casarse con él.

Durante su primera cita, ella mencionó cómo ése ya había sido el principio del fin, y cómo debería haberlo visto venir. Ella le dijo, después de que se encontraran en el aeropuerto, que necesitaba hacer una llamada telefónica, y en vez de dejarla usar su teléfono celular, él le dijo que utilizara el teléfono público. Mi amiga, no obstante ingenua, mencionó que esto contradecía a la persona que había conocido por teléfono y a través de los e-mails. Dijo que se había sentido un poco indignada, pero sin embargo se casó con él.

A medida que fueron pasando las semanas, las cosas empeoraron. Descubrió que no había ningún trabajo, y que la carta que él le había enviado era en realidad sólo el membrete de la compañía copiado en otra hoja. Es decir que su nuevo marido había falsificado un documento para engañarla.

Después, ella comenzó a recibir llamadas telefónicas de mujeres de Filipinas y Canadá diciéndole que su nuevo marido las había estado invitando (por Internet) a que fueran a vivir con él. Mi amiga estaba tan enloquecida que les dijo repetidamente que él les estaba mintiendo a todas mientras que el truco más grande de todos lo estaba jugando con ella. Las mujeres no le creyeron (¿por qué será que las mujeres tienden a no creerle a otra mujer cuando ésta está intentando advertirles de algo?), pero finalmente mi amiga les dijo: "Si quieren tener la prueba que yo estoy casada con él, entonces vengan aquí y se los probaré."

Finalmente se enteró a través de amigos y parientes que el Sr. Maravilloso era un mentiroso patológico que poseía una larga historia de haber usado a mujeres y de haber sido encubierto por su madre quien escondía las pistas, y, por más triste que sea decirlo, ésta no era la primera persona con quien se había topado. Yo (Wendy Koenigsmann) puedo decir lo mismo, y es por eso que he escrito esta página de Internet, porque puedo decirle que esta gente anda rondando por ahí afuera, y no quiero que a nadie más le suceda esto o tenga que atravesar una situación como la que hemos experimentado mi amiga y yo. Mi meta es que con mi página web, más gente, y no solamente mujeres sino también hombres, estén informados y no se conviertan en víctimas ellos también, porque es realmente una experiencia dolorosa.

Entonces ¿Qué es lo esencial al tratar con los psicópatas?

Evítelos. O una vez que sepa o sospeche qué son, evítelos.

Cualquier contacto que vaya más lejos con un psicópata será realmente perjudicial. Una vez que ha estado implicado con algunos de ellos, como muchas personas que conozco, también aprenderá a ver las “banderas rojas”. Este no significa que deba volverse paranoico con respecto a la gente, sólo cuidadoso.

El hecho es que a pesar de todos los estudios y las nuevas terapias, los psicópatas están “diseñados” para un mal comportamiento de por vida. El doctor Leland M. Heller, escribe que la gente que tiene este desorden presenta síntomas que incluyen la mentira, la trampa, la crueldad, el comportamiento criminal, la irresponsabilidad, la carencia de remordimientos, relaciones pobres, explotación, manipulación, destructividad, irritabilidad, agresividad, y fracasos en el trabajo. Muchos no exhiben un comportamiento criminal, pero actúan antisocialmente en profesiones socialmente aceptables.

El alcohol empeora el desorden, y los psicópatas son muy propensos al abuso de sustancias. Las causas son a menudo “una disciplina paternal pobre, la asociación con chicos ‘malos’, y una vinculación frágil con sus padres...” [Heller, 75]. Pero las causas también pueden ser sobre todo biológicas.

Otra característica es su extraño uso de las palabras, porque no pueden distinguir entre palabras neutras y emocionales. Una vez un individuo psicopático me dijo que estaba “deftly afraid of needles”(“le tenia un terror “deftly” a las agujas), pero la palabra “deftly” significa “habilidad”. En vez de decir “deathly afraid” (mortalmente, extremadamente aterrado), dijo “deftly”, y nunca notó que se había equivocado. (Ver el libro de Hare para más ejemplos interesantes de este fenómeno).

Más extraño aún, muchos encuentran que esta falla en el lenguaje del psicópata es encantadora, y los psicópatas tienden a hablar montones, especialmente cuando exudan su encanto.

¿La pregunta es, puede usted identificar a uno antes que ellos lo atrapen?

Por eso es importante estudiar si usted es de aquél tipo de personas que cae rendido a sus pies. Alguien que, en esencia, se convierte en presa al creer en ellos. Algunas personas pueden encontrar la preocupación por la psicopatía irrelevante, pero no lo es. La psicopatía causa tremendos daños en nuestra sociedad, y afecta nuestras vidas a todo nivel. Causa enfermedades y desórdenes como el PTSD (Desorden de Estrés Post Traumático). Víctimas inocentes también pierden su dinero, y estos depredadores sociales también provocan mucho daño económico a la sociedad.

Todos, y especialmente las mujeres, deberían aprender a identificar la psicopatía y a estar alertas a las banderas rojas. Esto no significa tener que diagnosticar a cada hombre con quien tiene una cita, ¡pero el sólo hecho de estar al tanto del desorden lo puede ayudar mucho! Fiándome en mis experiencias personales, creo sinceramente en el dicho: Mejor prevenir que curar”.

Quisiera enfatizar una vez más que creo de verdad que una mujer transfiere en el psicópata lo que quiere creer, hasta llegar al punto en el que lo pinta con una luz irrealista, por lo que los psicópatas también pueden “jugar con su cabeza” el respecto. La mayoría de las víctimas del psicópata sólo ven lo que quieren ver, al principio. Es por eso que Field dice, “La ingenuidad es el peor enemigo. Muchos/as se aferran a creer que su amado/a (el/la psicópata) tiene simplemente algunos problemas como cualquier otra persona, y no los síntomas de un desorden de la personalidad.” [Black, 59].

En el libro When Your Lover is a Liar (Cuando Su Amante es un Mentiroso) también se señala et tema de la psicopatía y la manera en que los psicópatas manipulan a las mujeres. El autor cree que lo que más entusiasma al psicópata es simplemente el ser capaz de “tomarle el pelo a una mujer”. En gente emocionalmente normal, no podemos entender que tipo de entusiasmo es este, ni porqué algunos llegan a tanto para engañar a alguien. Pero como lo dice el Dr. Heller, “los psicópatas no sienten ningún remordimiento, y en realidad hasta disfrutan de su comportamiento antisocial.” (Heller, 76)

Además, algo que creo los hace aún más peligrosos, es que pueden ser bastante encantadores y persuasivos, y que “tienen un conocimiento asombroso de las necesidades y debilidades de otra gente”, como lo expuesto en el texto Psychology In Action (Psicología En Acción): “Hasta cuando los derechos de sus socios les son indiferentes, son a menudo capaces de inspirar sentimientos de confianza y de fe.” Esto se ejemplifica mejor con un psicópata que profesa que “está todo bien”, mientras que le miente rotundamente en la cara con honestidad y candor aparentes, pero que luego lo acuchilla por la espalda apenas usted se da vuelta.

Al final, usted los “conocerá por sus frutos”, por así decirlo. Se cerciorarán de hacerle saber quién es el jefe. Como una víctima contó en el libro Without Conscience… (Sin Consciencia…) de Hare, no podía entender cómo era posible que alguien (el psicópata que ella había conocido) hubiera logrado colarse en su vida y que después hubiera desaparecido tan fácilmente. Es así como operan. Simplemente no les importa nadie en lo más mínimo. Excepto ellos mismos.

Otra característica muy fuerte a buscar (o escuchar) es lo que el doctor Hare llama el “placer del engaño”. Es como si el psicópata no tuviera ninguna necesidad ni propósito de mentir. El placer es alcanzado simplemente al tomarle el pelo a alguien.

En lo que se refiere a las adiciones y demás, “dentro de los lazos más claros, se encuentra el de la psicopatía y el abuso de alcohol y otras drogas,” [Black, 91], aunque la mayoría de los psicópatas nunca admitirán que tienen problemas con la bebida, mismo cuando esto es obvio. Tal y como lo dijo un psicópata, “Yo sé cómo beber. El beber es una responsabilidad, Y lo vengo haciendo desde los 12 años.”

Así que, una vez más ¿Pueden los psicópatas cambiar? ¿Puede usted cambiarlos?

No. Ellos deciden comportarse como lo hacen, aunque, hasta cierto punto tengan realmente un desorden de personalidad. Sin embargo, el Doctor Black cree que hasta aquellos pacientes que “muestran el mayor cambio, parecen incapaces de entender el grado en el cual sus acciones afectaron a aquellos que los rodeaban. Pueden seguir viviendo en el aislamiento emocional. El interés personal es un componente natural del maquillaje humano, pero es especialmente fuerte en los antisociales y deja a muchos de ellos incapaces de desarrollar una compasión total, una conciencia, y otros atributos necesarios para relaciones sociales exitosas”.

EL PSICÓPATA – La Máscara de la Cordura


EL PSICÓPATA – La Máscara de la Cordura

Imagine - si puede - no tener una conciencia, ninguna en absoluto, ningún sentimiento de culpa o de remordimiento, sin importar lo que haga, ningún sentido de preocupación por el bienestar de gente ajena, amigos, o hasta miembros de su familia, que pueda limitarlo. Imagine no vivir ninguna lucha contra la vergüenza, ni siquiera una en toda su vida, sin importar qué clase de acción egoísta, perezosa, dañina o inmoral usted haya realizado.

Y finja que el concepto de responsabilidad le es desconocido, excepto como una carga que otros parecen aceptar sin discutir, como tontos crédulos.

hora agregue a esta fantasía extraña la capacidad de esconderle a la gente que su psicología es radicalmente diferente a la suya. Puesto que todos asumen simplemente que la conciencia es universal entre seres humanos, ocultar el hecho de que usted no tiene conciencia no necesita casi ningún esfuerzo de su parte.

No es frenado de ninguno de sus deseos por culpabilidad o vergüenza, y otros nunca lo enfrentan por su sangre fría. El agua congelada en sus venas les es tan extraña, tan totalmente fuera de su experiencia personal, que raramente llegan a conjeturar siquiera sobre su condición.

En otras palabras, usted está totalmente libre de restricciones internas, y su libertad desenfrenada para hacer lo que le apetezca, sin remordimientos de conciencia es, favorablemente para usted, invisible al resto del mundo.

Usted puede hacer cualquier cosa, y así y todo su extraña ventaja sobre la mayoría de la gente, que está alineada por sus conciencias, seguirá muy probablemente sin ser descubierta.

¿Como vivirá usted su vida?

¿Qué hará con su ventaja enorme y secreta, y con la incapacidad correspondiente de la gente (conciencia)?

La respuesta dependerá en gran parte de tan sólo lo que sus deseos terminen siendo, porque no toda la gente es igual. Incluso los extremadamente inescrupulosos no son todos iguales. Alguna gente – así tengan o no una conciencia - honran la tranquilidad de la inercia, mientras que otras se llenan de sueños y de ambiciones salvajes. Algunos seres humanos son brillantes y talentosos, algunos son poco despiertos, y la mayoría, con o sin conciencia, se encuentran en algún lugar en medio. Hay gente violenta y no violenta, individuos a quienes los motiva el ansia de la sangre y otros que no tienen tal apetito. [... ]

Siempre y cuando no lo paren por la fuerza, usted puede hacer todo lo que quiera.

Si nace en el momento correcto, con un cierto acceso a alguna riqueza familiar, y poseyendo un talento especial para avivar el odio de la gente y el sentido de la pérdida, se las puede arreglar para matar a una gran cantidad de gente que ni lo sospeche siquiera. Con bastante dinero, usted puede lograr esto a distancia, y descansar con confianza observando todo con satisfacción. [... ]

Loco y espantoso - y verdadero, en aproximadamente un 4 por ciento de la población...

La tasa predominante de los desórdenes alimenticios anoréxicos se estima en un 3.43 por ciento, y se los juzga como casi epidémicos, pero esta cifra es una fracción más baja que la tasa de personalidad antisocial. Los desórdenes prominentes clasificados como esquizofrenia ocurren en solamente un 1 por ciento de [la población] – apenas un cuarto del índice de la personalidad antisocial - y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades dicen que el índice del cáncer de colon en los Estados Unidos, considerado como "alarmantemente alto," es aproximadamente de 40 por cada 100.000 – cien veces más bajo que el índice de la personalidad antisocial.

La gran incidencia de la sociopatía en la sociedad tiene un efecto profundo en el resto de nosotros, quienes también debemos vivir en este planeta, e incluso para los que no hemos sufrido trastornos clínicos. Los individuos que constituyen este 4 por ciento agotan nuestras relaciones, nuestras cuentas bancarias, nuestras realizaciones, nuestra autoestima, nuestra mismísima paz en la tierra.

Sin embargo, sorprendentemente, mucha gente no sabe nada sobre este desorden, o si lo hacen, sólo piensan en términos de psicopatía violenta - asesinos, asesinos en serie, asesinos de multitudes - gente que visiblemente ha quebrantado la ley muchas veces consecutivas, y que, si son detenidos, serán encarcelados, incluso llevados a la muerte por nuestro sistema jurídico.

No estamos comúnmente enterados, y por lo general tampoco identificamos a la gran cantidad de sociópatas no violentos que se encuentran entre nosotros, gente que a menudo no son infractores descarados, y contra quienes nuestro sistema jurídico oficial proporciona poca defensa.

La mayoría de nosotros no podría imaginar ninguna correspondencia entre la concepción de un genocidio étnico y, por ejemplo, el hecho de mentirle a su jefe sobre un compañero de trabajo sin sentir culpa alguna. Pero la correspondencia psicológica no sólo está allí; es escalofriante. Sencillamente, la relación está en la ausencia del mecanismo interno que nos tortura emocionalmente cuando elegimos hacer algo que vemos como inmoral, falto de ética, negligente o egoísta.

La mayoría de nosotros se siente ligeramente culpable si se come el último trozo de torta que queda en la cocina, e imagínese pues lo que sentiríamos si nos pusiéramos a lastimar a otra persona a propósito y de manera metódica.

Los que no poseen absolutamente ninguna conciencia constituyen un grupo por sí solos, así sean tiranos homicidas o simplemente francotiradores sociales despiadados.

La presencia o la ausencia de conciencia son una seria división humana, y podría decirse que es más significativa que la inteligencia, la raza, o hasta el género.

Lo que diferencia a un sociópata que vive del trabajo de otros de alguien que roba de vez en cuando en almacenes, o de uno que es un barón contemporáneo de ladrones - o lo que hace la diferencia entre un simple matón y un asesino sociopático - no es nada más que el estatus social, el instinto, el intelecto, el ansia de la sangre, o la simple oportunidad.

Lo que distingue a toda esta gente del resto de nosotros es un agujero completamente vacío en la psique, en donde deberían estar las funciones de humanización más desarrolladas. [Martha Stout, Ph.D., The Sociopath Next Door (El Vecino Psicópata)] (altamente recomendado).

Para aquellos entre Ustedes que estén buscando entender la psicopatía, el libro de Hervey Cleckley (The Mask of SanityLa Máscara de la Cordura), es el estudio absolutamente imprescindible del psicópata que no entra necesariamente dentro del tipo criminal. Este libro está agotado. Lo hemos escaneado y nuestro equipo de investigadores pasó dos semanas revisando el texto cuidadosamente para eliminar errores de conversión de texto. Usted puede descargar el libro entero GRATUITAMENTE como archivo PDF desde el enlace ubicado arriba a la izquierda. (Lea una Muestra de Capítulo de The Mask of Sanity- La Máscara de la Cordura).

"Agradable," "encantador," "inteligente," "despierto," "impresionante," "inspirador de confianza," y "un gran éxito con las damas": estas son las clases de descripciones usadas en varias ocasiones por Cleckley en su famoso estudio sobre psicópatas. También lo son, por supuesto, "irresponsable," "autodestructivo," y adjetivos semejantes. Estas descripciones destacan la gran frustración y los misterios que rodean el estudio de la psicopatía.

Los psicópatas parecen tener en abundancia aquellos rasgos más deseados por las personas normales. La despreocupada confianza en sí mismo del psicópata parece casi como un sueño imposible, y es generalmente lo que la gente "normal" intenta adquirir cuando asiste a talleres para ganar seguridad en sí mismo. En muchos casos, la atracción magnética del psicópata hacia los miembros del sexo opuesto parece casi sobrenatural.

La hipótesis seminal de Cleckley en lo que se refiere al psicópata es que sufre, de hecho, de una verdadera enfermedad mental: un déficit afectivo profundo e incurable. Si realmente llega a sentir algo, son solamente emociones de las menos profundas. Él hace cosas extrañas y autodestructivas porque las consecuencias que llenarían al hombre normal de pena, de odio a sí mismo, y de vergüenza simplemente no afectan en lo más mínimo al psicópata. Lo que para otros sería un desastre, para él no es más que un inconveniente pasajero.

Cleckley también nos presenta la visión de que la psicopatía es absolutamente común en la comunidad en general. Él ha recopilado algunos casos de psicópatas que funcionan por lo general normalmente en la comunidad como hombres de negocios, doctores, e incluso psiquiatras. Algunos investigadores ven la psicopatía criminal - designada a menudo bajo el nombre de desorden antisocial de la personalidad - como un extremo de una dimensión (o dimensiones) de la personalidad “normal”.

Podríamos clasificar a los psicópatas criminales como "psicópatas que han fracasado." La implicación de este fenómeno, por supuesto, es que muchos psicópatas pueden existir en sociedad arreglándoselas mejor que los que atraen la atención del sistema judicial y el de la asistencia social.

Harrington llega hasta a decir que el psicópata es el nuevo hombre, producido por las presiones evolucionarias de la vida moderna. Otros investigadores critican este punto de vista, señalando las verdaderas incapacidades de las cuales el psicópata clínico también sufre.

El estudio de los psicópatas "ambulatorios" – lo que llamamos "El Psicópata de la Variedad Jardín"-, acaba, sin embargo, apenas de comenzar. Muy poco se sabe sobre psicopatía subcriminal. Sin embargo, algunos investigadores han comenzado a considerar seriamente la idea de que es importante estudiar la psicopatía, no como una categoría clínica artificial sino como un rasgo general de la personalidad en la comunidad entera. Dicho de otro modo, la psicopatía se está reconociendo más o menos como un tipo diferente de ser humano.

Un aspecto muy interesante del psicópata es su “vida oculta” que a veces no está tan bien oculta. Pareciera que el psicópata tiene una necesidad regular de tomarse “unas vacaciones dentro de la inmundicia y la degradación" de la misma manera que la gente normal puede necesitar unas vacaciones en un complejo turístico en donde pueda disfrutar de alrededores y una cultura magníficos. Para lograr hacerse una mejor idea de esta "necesidad extraña" del psicópata - una necesidad que parece ser una prueba de que el "actuar humanamente" es muy estresante para el psicópata - lea más de La Máscara de la Cordura, capítulos 25 y 26.

También lea las especulaciones de Cleckley sobre lo que de verdad “era realmente anormal” en esta gente. Llega a estar muy cerca de sugerir que son humanos en todos sus aspectos – salvo en el hecho de que carecen de alma. Esta carencia de “calidad de alma” hace que sean “máquinas” eficientes. Pueden ser brillantes, escribir obras eruditas, imitar las palabras de la emoción, pero con el tiempo llega a estar claro que sus palabras no corresponden a sus acciones. Son el tipo de persona que pueden quejarse de estar siendo devastadas por la pena y que después van a una fiesta "para olvidar." El problema es que realmente SE OLVIDAN.

Siendo máquinas muy eficientes, como una computadora, son capaces de ejecutar rutinas muy complejas diseñadas para obtener de otras personas apoyo para lo que desean. De esta manera, muchos psicópatas son capaces de alcanzar posiciones muy altas en la vida. Es solamente al cabo de un cierto plazo que sus socios se dan cuenta del hecho de que su subida en la escalera del éxito está basada en la violación de los derechos ajenos. "Hasta cuando son diferentes de los derechos de sus socios, son capaces a menudo de inspirar esperanza y confianza”.

El psicópata no reconoce ningún defecto en su psique, ninguna necesidad de cambiar.

Psicópatas en la Nueva Era

Actualmente hay una verdadera explosión de informes de nuestros lectores sobre sus experiencias con individuos con quienes se han encontrado en los campos de “investigación alternativa”, así como en interacciones generales de sus vidas. Lo que es muy chocante es la cantidad de tales individuos que debe existir, basándonos en esos informes. ¡Esto no es sólo un acontecimiento ocasional, pareciera ser casi pandémico!

Nuestro equipo y nuestro e-grupo de investigación se han estado encargando por un tiempo de investigar y analizar estas interacciones y las características y la dinámica y las personalidades. Nuestra investigación nos ha llevado a identificarlos con lo que comúnmente se conoce como "Psicópatas." Pueden también ser Narcisistas dado que el Narcisismo parece ser simplemente una “faceta” del psicópata o una manifestación “más ligera” del mismo. Se podría decir que el Narcisista es un “psicópata de la variedad jardín” quien, debido a su “programación social”, tiene menos probabilidades de meterse en problemas con la ley. De esta manera, son "máquinas de supervivencia" muy eficientes que se pasan la vida causando un daño inmenso a sus familias, amigos y socios en los negocios.

Es solamente cuando una persona observa detenidamente y durante un tiempo largo al psicópata desarrollado - una suerte de Narcisista exagerado - que es capaz de ver la caricatura de los rasgos, lo que le hace entonces más fácil de identificar "al psicópata de la variedad jardín" - y/o al Narcisista.

Nuestro mundo parece haber sido invadido por individuos para quienes la visión de la vida y del amor es tan drásticamente diferente de lo establecido por la norma hace mucho tiempo que estamos mal preparados para tratar con sus tácticas de lo que Roberto Canup llama la "mentira verosímil.” Como él lo demuestra, esta filosofía de la "mentira verosímil" ha alcanzado los sectores legal y administrativo de nuestro mundo, convirtiéndolos en máquinas dentro de las cuales los seres humanos con emociones verdaderas son destruidos.

La película reciente, “Matrix” ("La Matriz") tocó una cuerda profunda en la sociedad porque ejemplificaba esta trampa mecánica en la cual tanta gente encuentra sus vidas enredadas, y de la cuál son incapaces de salirse porque creen que todos los que los rodean y que “parecen humanos” son, de hecho, igual a ellos – emocionalmente, espiritualmente u otros.

Tome, por ejemplo, el “argumento legal” como es explicado por Roberto Canup en su investigación sobre “el Psicópata Perito en Sociedad”. El argumento legal parece estar en los cimientos de nuestra sociedad. Esto equivale a nada más y menos que a al arte de la estafa: quien sea más hábil en el uso de la estructura para convencer de algo a un grupo de personas, es a quien se le cree. Puesto que este sistema de “argumento legal” ha sido establecido lentamente como parte de nuestra cultura, cuando invade nuestras vidas personales, por lo general no lo reconocemos inmediatamente.

Los seres humanos han sido acostumbrados a asumir que otros seres humanos - por lo menos - están intentando "hacer el bien" y "ser buenos" y justos y honestos. Y por eso, muy a menudo no nos tomamos el tiempo necesario de hacer una investigación profunda para determinar si una persona que ha entrado en nuestras vidas es, de verdad, una "buena persona." Y cuando luego nace un conflicto, caemos automáticamente en la suposición cultural de que en cualquier conflicto, una de las partes tiene parcialmente razón de algún modo, y la otra de algún otro, y que podemos formarnos una opinión sobre qué parte está más o menos en lo correcto. A causa de nuestra exposición a las normas del "argumento legal", cuando se presenta cualquier conflicto, pensamos automáticamente que la verdad se encontrará en alguna parte entre los dos extremos. En este caso, quizás sea útil aplicar una pequeña lógica matemática al problema del argumento legal:

Imaginemos que en una pelea, un lado es inocente, honesto, y dice la verdad. Es obvio que mentir no le aporta ningún beneficio a una persona inocente; ¿qué mentira puede decir? Si es inocente, la única mentira que puede decir es confesar falsamente "Fui yo quien lo hizo." En cambio, la mentira no es más que buena para el mentiroso. Él puede declarar ese "Yo no lo hice," y acusar a otro de haberlo hecho, al mismo instante que la persona inocente a quien ha acusado está diciendo “Yo no lo hice,” y está realmente diciendo la verdad.

La verdad – cuando está bien distorsionada por buenos mentirosos, siempre puede hacer que una persona inocente parezca mala – especialmente si el inocente es honesto y admite sus errores.

La suposición básica de que la verdad se encuentra entre el testimonio de las dos partes siempre se torna en ventaja hacia el que miente y en contra del que dice la verdad. Bajo la mayoría de las circunstancias, esta desviación sumada al hecho de que la verdad también va a ser deformada de tal manera a perjudicar a la persona inocente, resulta en que la ventaja siempre queda en manos de mentirosos - psicópatas. Hasta el simple acto de hacer una declaración bajo juramento es inútil. Si alguien es mentiroso, hacer un juramento no significa nada para esa persona. Sin embargo, hacer un juramento actúa fuertemente en un testigo serio, veraz. Una vez más la ventaja va para el lado del mentiroso. [Robert Canup ]

Esto subraya una de las únicas cosas sobre un psicópata: su aparente incapacidad de concebir la idea abstracta “del futuro”.

Se ha observado a menudo que los psicópatas corren con una clara ventaja sobre los seres humanos con consciencia y sentimientos, porque el psicópata no tiene consciencia ni sentimientos. Lo que parece ser es que la consciencia y los sentimientos están relacionados con el concepto abstracto de “futuro” y de “otros”. Es “espacio-temporal”. Podemos sentir miedo, condolencia, empatía, tristeza, y demás porque podemos IMAGINAR el futuro de una manera abstracta, basándonos en nuestras propias experiencias pasadas, o aunque no sea más en “conceptos de experiencias” en innumerables variaciones. Podemos “predecir cómo van a reaccionar los otros, porque podemos “vernos a nosotros mismos” en ellos, aunque estén “ahí afuera” y que la situación sea de algún modo diferente vista desde el exterior, aunque similar en su dinámica. Es decir, no sólo podemos identificarnos con otros espacialmente – por decirlo de algún modo - sino también temporalmente - en el tiempo.

El psicópata no parece tener esta capacidad.

Son incapaces de “imaginar” en el sentido de poder realmente conectarse con imágenes en algo así como una manera directa de “un ser conectándose con otro ser”.

Ah, de hecho, pueden imitar sentimientos, pero los únicos verdaderos sentimientos que parecen tener – eso que los conduce y los hace fingir diversos dramas para causar efecto - son una especie de "hambre predatoria", de lo que desean. Es decir, "sienten" la necesidad/el deseo como amor, y el no ser satisfechos en sus necesidades/deseos es descrito por ellos como el "no ser amados". Además, esta perspectiva de "necesidad/deseo" determina que solamente el "hambre" del psicópata es válida, y cualquier cosa que esté "allí afuera," todo lo que está fuera del psicópata, no es verdadero, excepto en tanto tenga la capacidad de ser asimilado por el psicópata como una clase de "alimento". "¿Puede ser utilizado o proporcionar algo?" es la única preocupación que el psicópata parece tener. Todo el resto - toda actividad – está subsumido en esta tendencia.

En pocas palabras, el psicópata - y el narcisista en un menor grado - es un depredador. Si pensamos en la interacción entre los depredadores y sus presas en el reino animal, podemos llegar a tener una cierta idea de lo que se esconde detrás de la "máscara de la cordura" del psicópata. Del mismo modo que un animal depredador adoptará toda clase de funciones furtivas posibles para acechar a su presa, sacarla fuera de la manada, acercársele y disminuir su resistencia, el psicópata construye todo tipo de camuflaje elaborado compuesto de palabras y apariencias - mentiras y manipulación - para "asimilar" a su presa.

Esto nos conduce a una pregunta importante: ¿qué es lo que el psicópata REALMENTE obtiene de sus víctimas? Es fácil ver lo que buscan cuando mienten y manipulan por dinero, bienes materiales o poder. Pero en muchos casos, tales como en las relaciones amorosas o en las falsas amistades, no es tan fácil ver lo que el psicópata está buscando. Sin desviarnos demasiado en especulaciones espirituales - un problema que Cleckley también confrontó - podemos decir solamente que pareciera ser que el psicópata GOZA de hacer sufrir a otros. Del mismo modo que los seres humanos normales disfrutan de ver a otra gente feliz, o de hacer cosas que hagan reír a otros, el psicópata disfruta de todo lo contrario.

Cualquiera que haya observado alguna vez a un gato jugando con un ratón antes de matarlo y de comerlo, se explicó probablemente a sí mismo que el gato “se entretiene” simplemente con las travesuras del ratón y que es incapaz de concebir el terror y el dolor sentidos por el ratón. Y el gato, por lo tanto, es inocente de cualquier intento malvado. El ratón muere, el gato se alimenta, y eso es la naturaleza. Los psicópatas por lo general no comen a sus víctimas.

Sí, en casos extremos la dinámica del gato y el ratón son llevados a cabo y el canibalismo posee una larga historia, en la que se asumía que ciertos poderes de la víctima podían ser asimilados comiendo alguna parte de ella en especial. Pero en la vida cotidiana los psicópatas y los narcisistas no llegan a tanto, por así decirlo. Eso hace que observemos con otros ojos la situación del gato y del ratón. Ahora preguntamos: ¿Es demasiado simplista pensar que el gato, inocente, se divierte simplemente con el ratón que corre por todo lados y que intenta frenéticamente escaparse? ¿Hay algo más en esta dinámica que salte a la vista? ¿Hay algo más que el hecho de estar "entretenido" con las travesuras del ratón que intenta huir? ¿Después de todo, en términos de evolución, por qué tal comportamiento sería atribuido al gato? ¿Es el ratón más sabroso debido a las substancias químicas del miedo que corren por su cuerpecito? ¿Es un ratón paralizado de terror una mejor comida de “gourmet”?

Esto sugiere que debamos rever nuestras ideas sobre los psicópatas con una perspectiva levemente diferente. Algo que sí sabemos es: mucha gente que experimenta interacciones con psicópatas y narcisistas dice sentirse “agotada” y confundida, y a menudo notan posteriormente un deterioro en su salud. ¿Quiere esto decir que parte de la dinámica, parte de la explicación del porqué los psicópatas perseguirán "relaciones amorosas" y "amistades" que ostensiblemente no pueden dar lugar a ningún beneficio material observable, es que hay una consumo real de energía?

No conocemos la respuesta a esta pregunta. Observamos, teorizamos, especulamos y formulamos hipótesis. Pero al fin y al cabo, solamente la víctima como individuo puede determinar lo que ha perdido en la dinámica - y es a menudo mucho más que bienes materiales. En cierto modo, parece que los psicópatas son comilones de almas o "Psicófagos."

El siguiente enlace conduce a una discusión, a una lista de puntos, y a una "guía de supervivencia" para tratar con el psicópata en sus tantos disfraces, compuesta por un individuo con experiencia personal. Esperamos que ayude al lector a evitar interacciones perjudiciales, y que usted pueda aprender de nuestros errores y de los errores de otros que han compartido sus historias con nosotros.

El GFC se encarga de atraer su atención a toda información que le ayudará a vivir una vida al resguardo de las manipulaciones asesinas de almas de otros.

Nuestro Sincero Agradecimiento a la dueña del sitio web sobre el Psychopathic Personality Desorden (Desorden Psicopático de la Personalidad) por su cordial permiso para citar su investigación cuando armamos este informe. Hasta que comenzamos a investigar, NO teníamos LA MENOR idea de lo extenso que era el problema, ni de cuántas victimas hay. Visite su sitio, vaya a sus enlaces para apoyar a grupos. Para una mirada más comprensiva del problema, basada en nuestra PROPIA investigación, lea por favor nuestro nuevo artículo: